Barcelona, la ciudad que enamora

Barcelona es una ciudad única, que tiene una enorme virtud. Es, a la vez, un lugar encantador para vivir y para visitar.  Su tamaño es el justo, no es una gran urbe, pero tampoco una ciudad pequeña, y tiene esa mezcla perfecta de modernidad e historia que permite admirarla y disfrutarla a un tiempo.

Tengo que reconocer que me cuesta ser objetivo con respecto a Barcelona, porque es una de mis ciudades favoritas. Es de esos lugares a los que siempre te gusta volver, y en los que siempre puedes descubrir pequeños detalles que te pasaron desapercibidos. Pero sobre todo es una ciudad que te enamora desde la primera vez que la visitas. Y si no lo has hecho nunca, te invito a que recorras algunos de estos lugares y te garantizo que caerás rendido a sus pies.

Antes de empezar te aconsejo algunos hoteles para recorrer Barcelona que son ideales como punto de partida para el recorrido de hoy.

Barcelona en 1 día

Desde la Plaza Catalunya, centro neurálgico de la ciudad, puedes comenzar el paseo por Las Ramblas, la calle más emblemática de la ciudad condal. Allí, entre un continuo ir y venir de paseantes, pasarás por lugares como el Teatro del  Liceo, o el Mercado de la Boquería, inaugurado en 1840  y cuyo encanto te atrapa de inmediato.

Más allá, y al finalizar la Rambla, te encuentras con el majestuoso monumento a Colón, y el puerto, donde se encuentra ubicado el Maremagnum, un complejo Comercial al que se accede por un precioso puente levadizo.

El único problema de Barcelona es que hay tanto que ver que una visita de pocos días te deja con ganas de más. Seas o no aficionado a la arquitectura, es imposible no quedar subyugado ante la genialidad de Gaudí, ya sea al observar el imponente templo de la Sagrada Familia, o la increíble Casa de La Pedrera, cuyas curvas desafían el tiempo y lucen hoy tan modernas como un siglo atrás.

Si, como es normal, te has quedado con ganas de apreciar más obras de Gaudí, la visita al Parque Güell es lo que terminará de convencerte de su enorme talento.

¿Más lugares que merece la pena conocer si estás de paso en Barcelona? Dirígete a la Plaza de Espanya y allí podrás visitar la Fira, con Montjuic al fondo, en una estampa que resulta sobrecogedora desde cualquiera de ambas perspectivas. Tanto desde la entrada, como desde lo alto, donde se puede apreciar la ciudad en toda su extensión.

Y si subes hasta allí, podrás recorrer el Poble Espanyol, un espacio donde se reproducen las diferentes culturas de todos los lugares de nuestro país, y contemplar, ya al anochecer, el increíble espectáculo de luces y color que supone la Fuente mágica.

Además de la enorme variedad de obras arquitectónicas reseñables, Barcelona es una ciudad con una intensísima vida cultural. Puedes aprovechar tu estancia para ver alguna de las obras que se representan en los teatros del Paralelo o visitar algunos de los innumerables museos de todo tipo de los que puede presumir: El Museo Egipcio, el MACBA (Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona) el Museo Olímpico, el Museo Nacional de Arte de Catalunya…y muchos más.

Eso siempre que tu visita no coincida con algún evento extraordinario como alguno de los muchos conciertos de estrellas internacionales que se celebran, habitualmente, en el Pabellón Olímpico, o algún partido de fútbol de Champions league en el que tome parte el equipo insignia de la ciudad, el Barça.

Es imposible aburrirse en una ciudad como ésta, llena de vida, color y pasión. Siempre hay algo que ver y siempre hay algo que hacer en Barcelona, tanto si estás de visita como si tienes la fortuna de residir aquí de forma permanente.

Y es que más allá de las grandes obras, hay otros modos diferentes de disfrutar Barcelona. Recorrer el Barrio de Gracia o  el Born, y tomar un café rodeado de un ambiente bohemio y cosmopolita, es una de mis actividades favoritas cuando visito la ciudad. Y es que, como ya he mencionado, Barcelona no es únicamente una ciudad para quienes están de paso, por mucho que existan innumerables puntos de interés para el turista. Barcelona es también una ciudad para vivir.

Estoy seguro de que, si nunca has estado aquí, te habrán entrado ganas de hacerte una escapada y conocer algunos de los lugares de los que te he hablado. Desde ya te digo que es una decisión muy acertada.