Presentamos un itinerario de 11 días por la isla norte de Nueva Zelanda.
1° día: de Auckland a Paihia
Auckland es el tradicional puerto de desembarque para el turista extranjero. Situado entre dos enormes puertos y circundado por 48 conos volcánicos extintos, Auckland ofrece aventuras para quien quiere el mar, recorridos para catar vino, excursiones en la selva y todos los atractivos de una sofisticada metrópoli. Si tenéis tiempo vale sin duda la pena explorar la ciudad, su pasado volcánico y sus islas. Tomad un barco del centro hasta las islas de Waiheke o Rangitoto, esta última un volcán adormecido. El viaje hacia el norte y el Bay of Islands empieza con la travesia del gran puente sobre el puerto. Una vez abandonado Auckland, en el trayecto entre un pueblo y el otro se pueden admirar selvas de árboles autóctonos, los paisajes típicos del campo neozelandés y una serie de playas y calitas. El destino del día es Paihia, una óptima base desde la cual explorar el Bay of Islands. De aquí podréis dar una vuelta en barco de las islas o alcanzar la graciosa Russell. La histórica Casa del Tratado de Waitangi es el lugar-símbolo del nacimiento de la Nueva Zelanda moderna.
Resumen: No os perdáis un viaje en barco hasta la isla de Waiheke o la visita al lugar en que fue firmada el Tratado de Waitangi, en el Bay of Islands.
2° día: Paihia a Kaitaia
La carretera para Kerikeri está costeada de huertos y de tenderetes donde se puede adquirir fruta fresca de estación. Notareis las insignias de los estudios de los muchos alfareros y pintores a las que esta zona debe en parte su carácter distintivo. Kerikeri es una ciudad llena de cosas que hacer. Aquí encontraréis galerías, café y viñedos, gastronomías, campos de golf y lugares de interés histórico como el Stone Store – el más antiguo edificio de piedra de la nación – y él aún más venerable Mission House, completado en el 1822. Las desviaciones panorámicas en la carretera para Kaitaia comprenden las magníficas bahías de Matauri y Tauranga. El cercano puerto de Whangaroa es un destino obligado para los amantes de la pesca. Yéndose más al norte, las magníficas playas de Doubtless Bay os encantaran con su cándida arena y las aguas cristalinas. Vela, kayak de mar, senderismo a caballo y golf son las actividades que esta zona ofrece. Si tenéis tiempo, llegar hasta el faro de Cape Reinga – podréis decir de haber estado en el punto más a norte de Nueva Zelanda. Kaitaia es la capital de la región septentrional del País, casi subtropical. De aquí se puede coger un bus que lleva a la Ninety Mile Beach (playa de las noventa millas).
Resumen: No os perdáis el pescado y las patatas fritas del Mangonui Fish Shop de Doubtless Bay o una excursión a Cape Reinga, a lo largo del Ninety Mile Beach.
3° día: de Kaitaia a Omapere
La carretera interior hacia Hokianga os hará pasar por la selva de Herekino, dónde se puede bajar para pasear y descansar del viaje. En Kohukohu podréis admirar algunos fascinantes edificios históricos. Un transbordador para los coches os conducirá más allá del puerto hasta Rawene, una etapa ideal para un café y un vistazo a la artesanía local. Poco más allá es la vez de Opononi y Omapere, bonitas aldeas en las riberas del puerto de Hokianga. Os podréis dar aquí al surf sobre las dunas de arena o bien – y se trata de una experiencia muy chula – visitar la magnífica selva de Waipoua, dónde se encuentran los más imponentes kauri autóctonos y el Tane Mahuta, con toda probabilidad el árbol más grande que hayáis visto nunca.
Resumen: No os perdáis el surf sobre la arena al puerto de Hokianga o un paseo entre los gigantes vivientes de la selva de Waipoua.
4° día: de Omapere a Auckland
Yendo hacía el sur antes de Dargaville encontraréis los Kai Iwi, tres lagos circundados por dunas arenosas perfectas para el camping, la natación, la pesca y el kayak. Superado Dargaville, en Brynderwyn se tuerce hacia Kaiwaka, una aldea conocida por sus quesos holandeses. Continuando hacia el sur es la vez de Wellsford, desde dónde se gira a la derecha hacia Helensville. La calle sube aquí por las colinas y ofrece espléndidas vistas del puerto de Kaipara y el campo circunstante. En Kumeu se gira hacia Waitakere, a lo largo de una espléndida carretera panorámica que atraviesa el relieve montañoso homónimo. Auckland aparecerá apenas se deja la aldea de Titirangi. La aldea surge entre dos grandes puertos y es el punto de salida ideal para vuestras aventuras sobre el mar.
Resumen: No os perdáis una excursión en la selva de Waitakere o una visita a uno de los conos volcánicos de Auckland.
5° día: de Auckland a Whitianga
El destino de hoy es Whitianga, en la península del Coromandel. A lo largo del trayecto podréis admirar espléndidas vistas de la costa y un sucederse de maravillosas playas flanqueadas por árboles de pohutukawa por los que esta región es célebre. Transcurrid la noche en la ciudad de mar de Whitianga.
Resumen: No os perdáis Cathedral Cove cerca de Hahei, en la península del Coromandel.
6° día: de Whitianga a Tauranga
Después de un paseo matutino a lo largo de la playa de Whitianga, dirigiros a sur hacia Hot Water Beach, dónde las aguas calientes de esta zona termal rebosan rehirviendo por la arena. Después de un relajante baño, dirígiros hacia Whangamata, una de las ciudades de mar más atractivas del País. Gozar y disfrutar aquí la playa, los cafés y los paseos en la selva. Además es posible alquilar bicicletas, tablas de windsurf y kayak. En el Bay of Plenty (bahía de la abundancia), os espera la próspera ciudad de Tauranga. Aquí podréis subir sobre embarcaciones en alquiler para la pesca, el snorkeling o para ver delfines. La cercana localidad de Mount Maunganui es una meta del surf y los paseos sobre la playa.
Resumen: No os perdáis la oportunidad de crear una piscina termal toda para vosotros en Hot Water Beach o subir sobre el monte Mauao, de cuya cima se goza una espectacular vista de Tauranga, Mount Maunganui y el Bay of Plenty.
7° día: de Tauranga a Rotorua
A una hora de Tauranga encontraréis Rotorua. Este centro está situado a lo largo del anillo del fuego del pacífico con mucha actividad volcánica. Aquí podréis explorar las zonas geotermales y descubrir la cultura única de los maoríes neozelandeses.
Géiser, fuentes calientes, barro hirviente y colores decididamente fuera de lo normal son las señales que llegan a la superficie de la actividad geotérmica de Rotorua. Durante la permanencia podréis apreciar las muchas manifestaciones de la cultura maorí que la ciudad ofrece y visitar a uno de los once estupendos lagos rozados por numerosas selvas.
8° día: de Rotorua a Whakatane
Whakatane es una ciudad costera pocos kilómetros a norte de Rotorua y está entre los centros más soleados del País. Es aquí que se encuentra la isla White, un espectacular volcán activo visitable en barco o helicóptero.
Resumen: No os perdáis la isla de White, un volcán activo.
9° día: de Whakatane a Gisborne
La etapa de hoy os lleva al punto más a este de Nueva Zelanda además de ser el primer lugar al mundo a ser iluminado por el sol. Hay mucho que hacer y que ver mientras se dobla el east cape. Os podréis dedicar aquí a jet boating, kayak o rafting sobre el río Motu, para luego echar un vistazo a los plácidos asentamientos costeros de Omaio, Te Kaha, Waihau Bay e Hicks Bay. Natación, equitación, pesca e inmersiones son los pasatiempos preferidos de esta zona. La cultura maorí está aquí particularmente viva – notaréis sus característicos arcos de acceso y lugares de culto y asamblea preciadamente entallados. Gisborne es una luminosa ciudad conocida por el buen vino y las fantásticas playas, perfectas para el surf. Kaiti Beach fue teatro del primero desembarque de un barco europeo en Nueva Zelanda.
Resumen: No os perdáis la oportunidad de visitar el Hicks Bay, o de ser los primeros al mundo en ver salir el sol en Wainui Beach, cerca de Gisborne.
10° día: de Gisborne a Napier
Hay dos carreteras que conectan Gisborne a Napier, y tardan ambas tres horas más o menos. La carretera interior atraviesa forestas y campo, mientras que la del litoral da acceso a las fabulosas playas de la península de Mahia. En proximidad de Napier se pueden admirar la playa de Waipatiki y el lago Tutira. En el 1931 un terremoto casi arrasó la ciudad de Napier. Fue reconstruida en el estilo de la época, y es considerada hoy la capital mundial del déco. Las viñas del Hawke’s Bay son fácilmente accesibles desde Napier. Otra atracción local es la colonia de sule de Cape Kidnappers.
Resumen: No os perdáis la ocasión de visitar a una de las empresas vinícolas del Hawke’s Bay – la zona circunstante a Napier – o de alcanzar la cima del Te Mata Peak y disfrutar del extraordinario panorama.
11° día: de Napier a Wellington
En la carretera que continua hacia el sur y os lleva en dirección de Wellington se tienen ejemplos del típico campo neozelandés, hecho de colinas onduladas sobre las que pastorean en gran número vacas y ovejas. Si tenéis tiempo, haced una pequeña desviación hacia Martinborough para degustar uno de los esquisitos Pinot Noir del Wairarapa. Para alcanzar Wellington hace falta superar el grupo montañoso del Rimutaka: una vez superado, el trayecto es muy fácil. Wellington es una ciudad pequeña pero rica en cultura y carácter. Encerrada entre la bahía y las colinas, el centro se ve cómodamente a pies y ofrece al visitador café, restaurantes, museos y tiendas de todo tipo. Danza, teatro y conciertos son una especialidad de Wellington.
Resumen:Visitad el museo nacional Te Papa Tongarewa, mirad de cerca los kiwis en el Karori Wildlife Sanctuary y degustad un buen capuchino en los bares de Wellington.